viernes, 21 de enero de 2011

No Mas Sangre


Hola a todos.

La ola de violencia que cubre a México ha llegado a niveles tan críticos y desesperantes que la sociedad empieza ya no solo a desesperarse, si no a tomar con apatía el crimen que se ha vuelto en algo de todos los días.

Esta desesperación ha llevado a diversos sectores de la sociedad a exigir que se detenga la violencia. Una de las más recientes campañas contra la violencia fue la llevada a cabo por los caricaturistas de La Jornada, liderados por Eduardo del Rio, mejor conocido como Rius. La campaña lleva el lema de “No más sangre”, un reclamo justo y sobre todo necesario, tomando en cuenta los niveles actuales de violencia que vive el país. La campaña ah cobrado fuerza sobre todo en las redes sociales, en donde la gente hizo suyo el reclamo y alzó la voz.

Todos los mexicanos deseamos que la violencia cese y la sangre deje de correr por nuestro país, por lo que hay que señalar a los responsables directos de esta situación. Antes que otra cosa, hubo un fuerte reclamo a Felipe Calderón. Las críticas lo señalaban a él casi como causante único de los problemas y la ola de violencia. Mas allá de criticas, eran señalamientos casi personales y en algunos casos parecía una catarsis para intentar sanar la, aun abierta, herida del 2006. Pero en casi cada reproche, se pasa por alto el reclamo a los principales causantes de la violencia: los narcotraficantes. Esos hijos de puta como los llamo Héctor Aguilar, son los principales responsables de esta situación que vive el país, aunque no los únicos.

Señalar a Felipe Calderón como responsable casi único de la violencia es totalmente absurdo. Es cierto que ha fallado sistemáticamente en lo que a seguridad se trata, cayendo en una incompetencia casi criminal. Pero cabe recordad que el no es el único que gobierna en México. Se supone que en nuestro pais el poder está dividido en los famosos poderes de la unión, los cuales han fallado en prácticamente todos sus deberos en lo que a seguridad concierne. El poder judicial no tiene la capacidad de siquiera encarcelar a delincuentes con todos los elementos en su poder, además de la profunda infiltración que existe en los cuerpos de seguridad por parte del crimen organizado. Mientras, el poder legislativo no ha podido sacar adelante  las reformas necesarias para el mejor cumplimiento de la ley como por ejemplo la autonomía del ministerio público, o el mando único de las policías.

Aunado a todo lo anterior el país se divide en tres niveles de gobierno. Federal, estatal y municipal. Esta demás decir que estos tres niveles, pero sobre todo el municipal, han fallado en su tarea de brindar seguridad a los ciudadanos, siendo muchos incluso cómplices de los mismos delincuentes.

El tema de la violencia en México es muy complejo, por lo que resulta un tanto ambiguo el lema “No más sangre” de esta campaña, ya que no sabes si es un reclamo, una petición, un deseo o todas juntas.

Esta ambigüedad ha llevado muchos analistas a denostar esta campaña por el simple hecho de que la promueve una serie de “intelectuales” de corte ideológico totalmente opuesto, sacando a relucir sus argumentos ya un poco gastados en contra de los críticos a esta “guerra” contra el narcotráfico.

El problema de muchos analistas “pro guerra” es que asumen que aquellos que piden un cambio en la estrategia del combate a la delincuencia quieren que el gobierno se quede de brazos cruzados. Es más, asumen siempre que existe una falta de alternativas y propuestas de aquellos en contra de la guerra contra el narco, siendo que si se han planteado numerosas alternativas, tomando muchas veces como ejemplo experiencias internacionales. En lo personal nunca he leído o escuchado a algún crítico de la guerra contra el narcotráfico que pida la inacción total del gobierno, al contrario, se plantes que el estado use toda su fuerza, pero de manera más inteligente y no solo exponiendo la vida de las personas y de los elementos de las fuerzas de seguridad.

Es iluso, y hasta peligroso, pensar que el problema del crimen organizado se resolverá únicamente a balazos. Al mismo tiempo es absurdo pensar que el crimen se acabara inmediatamente construyendo más escuelas. El combate al crimen organizado requiere una estrategia integral que tenga tanto un rescate social de las zonas más conflictivas, como del uso de toda la fuerza del estado. Este tipo de acciones tal vez no sean llamativas y espectaculares, pero al menos han demostrado en otros países, ser más efectivas.

México vive uno de los peores momentos de su historia, por lo que debemos ser críticos y duros con aquellos que nos han llevado a esto, desde el Presidente Calderón, legisladores, gobernadores y demás políticos por su inacción, omisiones y estupideces. Pero sobre atacar con todo a esos hijos de puta que han sumido al país en el pozo sin fondo en el que se encuentra ahora.

 Bueno, eso es todo por mi parte. Me despido. Hasta mi próxima entrada. Adiós.

1 comentario:

odalis dijo...

Yo creo que el punto es otro, no se trata de incompetencia. Cada cual sigue sus intereses y creo que calderon y los demas hacen lo que a ellos les conviene, eso es lo que les importa. Te invito mi blog para que entiendas mejor mis puntos de vista.