jueves, 24 de septiembre de 2009

Presupuesto 2010

Hola a todos.

México vive la peor crisis de toda su historia. Los indicadores económicos nos demuestran que vivimos una situación extremadamente complicada. El desempleo se ubica por arriba del 6%, y la economía ha caído cerca del 10% en este año. Desafortunadamente, el panorama para el año siguiente tampoco es muy alentador. Con un boquete fiscal de 300 mil millones de pesos, muchos de los programas de apoyo a la gente pobre, inversión publica, entre muchas otras acciones, se verán seriamente afectadas.

Ante un panorama tan catastrofista el presidente mando al senado un paquete fiscal que supuestamente taparía el hueco fiscal. Entre los puntos importantes destacan nuevos impuestos. Se desglosan de la siguiente manera: Fuente

Uno de los impuestos que más controversia ha causado ha sido el 2% al consumo generalizado, que según dice Calderón, ayudará a los mexicanos más pobres (sic). Además del aumento del ISR de 28% a 30%.

El nuevo paquete fiscal nos demuestra nuevamente la visión corta y enana del ejecutivo y de toda su camarilla política (mal llamado gabinete). Es increíble, que en medio de una de las peores crisis económicas de la historia, su forma de intentar contrarrestar sus efectos sea atacando la ya de por si desmantelada economía popular. Con un 2% generalizado, lo único que lograran es mermar el consumo, lo cual a su vez afectara la producción, lo que afectara las fianzas de las empresas derivando en despidos. Sin trabajo, la gente no puede consumir, y así continua el ciclo. Además, el aumento al ISR lo único que logra es poner a México en desventaja competitiva con respecto al resto del mundo. Lo hace menos atractivo para los inversionistas, que llevaran su capital a otras naciones como Brasil o China. Y sin inversión, no habrá crecimiento, ni tampoco empleos. Aunado a esto, los impuestos especiales harán de México un país menos competitivo, además de que se dificultará el acceso de personas de bajos recursos a tecnologías como el Internet.

Una de las acciones que más urgen es la reducción de la obesa burocracia mexicana. Si bien es cierto que el ejecutivo plantea eliminar 2 secretarias “inútiles” para ahorrar dinero, la burocracia en México ha sido, otra vez, la única opción del gobierno para crear empleos. Hemos regresado al proteccionismo de López Portillo. Según un análisis legislativo priista, la alta burocracia en México pasó de seis mil a 47 mil 495 plazas en toda la administración pública federal, pero además mejoró su sueldo al pasar de un promedio mensual de 39 mil pesos y prestaciones por 200 mil pesos en el año 2000, a 100 mil pesos mensuales y prestaciones anuales de 700 mil pesos promedio en la actualidad. Aunque claro, en este estudio faltaron los sueldos y prestaciones de los diputados, senadores, gobernadores, etc, los cuales les puedo asegurar, no viven con un salario mínimo. La realidad es que no se quiere el dinero de los nuevos impuestos para los pobres, si no para seguir manteniendo la obesa burocracia mexicana. Todo el mundo habla de que hay que apretarse el cinturón. Desafortunadamente nunca nos dicen de quien será ese cinturón.

En estos tiempos de vacas flacas las noticias de derroches no podían faltar. Como las comidas y reuniones millonarias hechas por los miembros del IFE, o como los obscenos bonos a los que los diputados salientes de hacen merecedores.

Y por el otro lado, tenemos a estos ejemplares empresarios mexicanos como los cerveceros, que amagan con retirar inversión de México si el plan fiscal avanza, ya que este prevé aumentar el impuesto especial a la cerveza. Pues seria interesante saber en donde estos señores encontraran un paraíso fiscal tan redituable como México, el cual les ha permitido formar un cómodo duopolio entre Modelo y Femsa, los cuales controlan cerca del 98% del mercado mexicano. Así que es un grito desesperado del duopolio por no perder dinero. ¡Pobres empresarios, no se vayan a quedar en la calle!

Bueno, eso es todo por mi parte. Me despido. Hasta mi próxima entrada. Adiós.

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