Hola a todos.
Muchos hemos oído que la política no es más que un show. Y esta definición no pudo ser más acertada para el momento que actualmente vive una parte de la política mexicana: la seguridad publica federal.
Basta recordar como en 2005 se monto, literalmente, una escenificación de la captura de la banda de secuestradores conocidos como “Los Zodiacos”. En el momento de la “escenificación” se hizo pasar todo como un gran logro de la policía (lo que hasta cierto punto si fue) pero meses después y tras mucha presión mediática, la PGR se vio obligada a reconocer que la detención de la banda, y de su miembro mas controvertido, la francesa Florence Cassez, fue solo una recreación.
Esto lo traigo a colación por que se ha vuelto a poner en duda acciones de la policía federal en el combate al crimen organizado.
La primera gran acusación se dio días después de que el narcotraficante conocido como “La Barbie” fuera detenido. Se dijo en diversos medios de comunicación que el narcotraficante no fue detenido por labores de inteligencia, si no más bien fue por que el capo se entrego a unos patrulleros federales, al rebasarlos intencionalmente en una carretera…
Y el segundo gran “montaje” se dio hace un par de semanas cuando dos los periodistas de Televisa y Multimedios secuestrados por miembros del crimen organizado, fueron liberados, argumentando que en realidad no fue un rescate, si no que mas bien fueron liberados por los secuestradores, y que la PF se paro el cuello presentándolos como un gran logro de ellos.
La creación de montajes no es algo nuevo en este país. La desconfianza hacia las autoridades hace que cualquier acción del gobierno, incluso buena y totalmente apegada a derecho, quede siempre empañada por un velo de misterio y recelo. Sumado a eso, tenemos medios de comunicación que aman este tipo de sospechas y la explotan en su público que igualmente ama ese tipo de eventos.
La falta de resultados concretos ha llevado a la seguridad pública federal a hacer un show en todo. Tal vez no todos los operativos sean “montajes”, pero si son verdaderos espectáculos los que se hacen después. Presentar a los “narcos” capturados ante los medios de comunicación, con arsenales enteros frente a las cámaras, eso si es un espectáculo. Tomemos por ejemplo al antes mencionado narcotraficante La Barbie, cuya entrevista, transmitida a nivel nacional, resulto no tener validez jurídica ya que no se hizo ante la autoridad jurídica correspondiente…
Por más que se intente decir que es una muestra de la fuerza del estado, es más bien una muestra de la desesperación del estado. De querer hacernos pensar que se están haciendo las cosas bien cuando en realidad no todo va tan bien.
La lucha que se esta dando es necesaria y nadie puede argumentar en contra de ello. Pero mientras los grandes errores se intenten tapar con grandes espectáculos, no podremos ver la verdadera dimensión del problema que nos aqueja.
Bueno, eso es todo por mi parte. Me despido. Hasta mi próxima entrada. Adiós.
1 comentario:
Muy buen artículo.
Felicidades.
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